El tercer relato que presenta la autodenominada comunidad indígena Lule del Nogalito en los últimos años supera la imaginación de todo lo posible. Una fantasía que seguramente posee ayuda de algún historiador de la universidad nacional de Tucumán y por supuesto como siempre de los abogados que le asesoran de ANDHES y otros abogados. ¿Quién pone el dinero? Sigue siendo una gran incógnita.
Uniendo toda la información que fueron recibiendo en los múltiples juicios que han tenido a lo largo de estos años, crearon un relato que por poco falta que le conecten con Adán y Eva. Leamos el tercer relato del origen de la falsa comunidad Lule de Tucumán:
“…la comunidad es descendiente dl pueblo Lule…y se radicaron en la zona desde el siglo XVIII, actualmente continúan vigentes sus costumbres e idiosincrasia, cuenta con más de 80 familias que la integran y poseen las tierra para la comunidad….
“….En 1767 estas tierras, las que hoy se conocen como localidad de Raco, fueron apropiadas (acaparadas) por la “Compañía de Jesús” y luego fue expulsada esta compañía por la “Real Junta de las Temporaldades” quien a partir de 1769 “sacó a la venta la llamada hacienda de los Lules” tierras comprendidas entre ellas, la estancia de Río Colorado Lules, la de San Pablo, la de Taficito, San Javier y San Jenuario Raco entre otras.
Comunidad Ulumpmampa es el nombre sonoro que tuvo antes de 1800 el río tucumano de la hermosa Quebrada de Lules, es pues el nombre antiguo del actual Río Grande Lules, el que divide Siambón y Nogalito.
La voz “Ulumpmampa” se compone de Ulump y Mampa Unum teimpo verbal de Ululumy que tiene el significado de “varios ríos chicos y uno grande que corre haciendo ruídos” .Esta comunidad actualmente se llama “Nogalito y Potrero de las Tablas” . En cuanto a mamapa significa, sin dudas agua o ríos o derivada de uma (agua)
…En 1800 la comunidad de Ulumpmampa fue liderada por el cacique Mateo Cruz junto a su cónyuge Cipriana ramos agricultores y criadores de mulas. Tuvieron cinco hijos, los que muchos de ellos permanecemos en el territorio indígena El Nogalito (antes Ulumpmampa).
En 1813 una parte de Ulumpmampa el ejército realizó una forestación de nogales, así es que más tarde empieza a llamarse Nogalito y hacia el sur del mismo se construyó un potrero de palos o tablas para el descanso y el forraje de los mulares, que en ellos trasportaba víveres desde la ciudad de Tucumán, con rumbo a los valles Calchaquíes y Catamarca y así fue que a este lugar le quedó como nombre “Potrero de las Tablas”…
…En el año 1905 los bisnietos de Mateo Cruz, trataron de regularizar la situación dominial de las tierras de Nogalito, en exigencias a la entonces legislación impuesta por el Estado. ..
En 1999 se reoganiza la comunidad Ulumpmampa (el nogalito) para dar resistencia a la segunda colonización promovida por distintas personas guiadas por intereses económicos.
La organización ancestral de nuestro Lules del siglo XVI fue conocida como “la Nación Lule” compuesta por varias tribus dispersas entre ellas Ulumpmampa, lideradas por aquel célebre cacique llamdo Kanamikó a posterior Kapjyan, luego por el cacique Anchajpa en 1760 por el cacique Antonio Camal y en 1800 por el cacique Mateo Cruz (apellido preveniente de la dominación y evangelización con la espada y la cruz) y desde 1999 a la fecha por el actual cacique Joaquín Pérez….”
Las Tres versiones totalmente distintas del origen de la comunidad manifiestan claramente que es un relato inventado a los fines de conseguir la personería jurídica y así obtener “gratis” tierras y dinero del Estado Argentino, es decir de todo el pueblo argentino. Es un relato lleno de “fantasías” y mentiras evidentes.
ANÁLISIS CIENTÍFICO Y CRÍTICO DEL RELATO:
A continuación, ofrecemos un análisis detallado del tercer relato y sus grandes errores históricos. Pedimos perdón por anticipado por lo extenso del análisis; pero el relato lleno de falsa información, nos lo demanda.
Por la extensión del texto iremos haciendo un análisis detallado de sus afirmaciones erróneas y mal intencionadas.
- Decir que “…la comunidad es descendiente del pueblo Lule…y se radicaron en la zona desde el siglo XVIII, actualmente continúan vigentes sus costumbres e idiosincrasia, cuenta con más de 80 familias que la integran y poseen las tierra para la comunidad….” Es totalmente FALSO porque en el inicio del siglo XVII, más concretamente en sus inicios (1601) ya era una propiedad privada y así seguiría en adelante, sin que exista un documento histórico que afirme lo que ellos dicen. Más de un siglo antes de lo expuesto por ellos ya era propiedad privada la zona en cuestión. En ningún documento del archivo histórico de la provincia existe documentación que en esa zona se radicaran descendientes del pueblo Lule en esa fecha. Por el contrario, desde el XVII al XVIII, más precisamente desde el 1645 al 1776, la compañía de Jesús lo usó para la cría de mulares, invernada del ganado vacuno de los valles de Tafí y especialmente sacar la MADERA (potrero de las tablas) con las que hacían las carretas tan famosas de las estancias de San Ignacio al sur y de la estancia de san José de Lules.
- Nunca existió una comunidad Ullumpmampa en el Nogalito. Al contrario, desde el año 1601 en adelante esas tierras (Nogalito, Duraznillo, Potrero de las tablas) en su mayor extensión pasaron a ser propiedad privada por Merced del Gobernador de Tucumán al capitán García de Medina, tal cual está registrado en el archivo histórico de la Provincia de Tucumán, por estar “yermas y despobladas”.
En 1640 el Hijo del capitán García de Medina, dona las tierras a la compañía de Jesús, todo lo contrario, a lo que coloca el Sr. Manuel Pérez guiado por historiadores cómplices de la mentira. La compañía de Jesús no se apropió ni acaparó las tierras allí mencionadas por él en 1767. Gran error histórico es poner esa fecha adjudicando a la compañía de Jesús que se apropiara de tierras, puesto que es en ese año donde la compañía de Jesús fue expulsada de América por la corona española y portuguesa.
En 1767 comienza el camino de relevamiento de todas las tierras de los jesuitas que ocupaban más del 60% de Tucumán, para lo cual deben conformar lo que se denominó “Junta de Temporalidades”. En el relevamiento y su posterior remate de los distintos potreros de los Jesuitas, el denominado “Potrero de san Genuario” fue dividido en dos por su gran extensión. Del río Grande al este, siguió llamándose San Genuario. Del río Grande al Oeste, le pusieron Potrero del Durazno y fue comprado por Juan José Quinteros, quien fue el que lo dividió en tres y lo vendió como hemos aclarado en el segundo relato.
Fue Juan Joseph Quinteros quien compró en remate judicial el Potrero del Durazno y denominó la división del mismo para su venta, en Nogalito y Potrero de las tablas. El potrero del Nogalito que es el que nos interesa fue vendido a Joseph Andrés Romano y así sucesivamente fue pasando de venta en venta a Albeana Santillán y esta le vendió a Mateo Cruz en 1845. Desde el deslinde judicial de 1905 realizado por los hijos de Mateo y Cipriana las parcelas del Nogalito se fueron vendiendo a distintos propietarios.
Cuatrocientos años de títulos (1601 a la fecha) justifican y nos dan autoridad para decir que el Sr. Joaquín Manuel Pérez, quienes lo siguen, sus historiadores y sus abogados están mintiendo y cambiando la historia; a la vez que falta el respeto a la Compañía de Jesús quien compró la mayoría de sus propiedades y las restantes fueron donadas, como se encuentra en el libro único de los títulos de propiedades de los Jesuitas en Tucumán, que está en el archivo de los Dominicos.
- Así mismo decir que “….En 1767 estas tierras, las que hoy se conocen como localidad de Raco, fueron apropiadas (acaparadas) por la “Compañía de Jesús” y luego fue expulsada esta compañía por la “Real Junta de las Temporaldades” quien a partir de 1769 “sacó a la venta la llamada hacienda de los Lules” tierras comprendidas entre ellas, la estancia de Río Colorado Lules, la de San Pablo, la de Taficito, San Javier y San Jenuario Raco entre otras”, es tener un desconocimiento total de la historia y la ubicación geográfica.
Entre el potrero de Raco mencionado en el relato que también pertenecía a los Jesuitas y el Potrero de san Jenuario (un pedazo de él, es hoy el Nogalito) allí mencionado, se encontraban en medio los potreros del Zanjón y el Potrero del Siambón. Es a su vez altamente ofensivo decir que los Jesuitas se acapararon de Raco, pues en el tomo único de los Jesuitas se encuentran las escrituras de su compra.
- Volvamos a la parte más “ridícula y fantasiosa”.
Como el lector ya tomó consciencia, al leer la tercera presentación, introducen una palabra quechua para dar mayor consistencia a su falso relato: dicen ser la Comunidad Ulumpmampa
Es importante aclarar por respeto al Kichua, que el profesor Julio S. Storni en su libro “El hombre de Tukma” pág 166- 167 dice:
“Huhllunpampa, Ullumampa, Ulumpamampa, Oliplanpa , Ulumampa eran distintas maneras de escribir estas palabras por los atolondrados españoles de los primeros días… al río que hoy denominamos Lules.
- Huh = uno, solamente uno.
- Llun= todo entero, todos
- Pampa= llanura
Es decir Huhllun: todo entero, se vuelcan en la pampa o llanura.
Otra posible etimología:
- Huh = uno, solamente uno.
- Yun= unión, vuelta o restitución.
- Pampa= llanura.
Es decir que todos los afluentes se reúnen o restituyen a un solo cauce. Rio que se forma por muchos otros y corre unificado por la pampa”.
Es totalmente correcto decir que la denominación Ulumpmampa se daba al actual río Lules que sobre la llanura o pampa se desplaza hasta el río Salí. Es en esa zona donde vivieron los lules (estancia San José de Lules, y específicamente la zona de El Manantial donde estuvo la encomienda de los lules etc) y no querer inventar que viene haciendo ruido desde arriba para justificar de algún modo la localidad del Nogalito, cuando afirman: La voz “Ulumpmampa” se compone de Ulump y Mampa Unum teimpo verbal de Ululumy que tiene el significado de “varios ríos chicos y uno grande que corre haciendo ruídos”
- Las únicas tierras que llevaron el nombre de Ulumpmampa son las concedidas como Merced al capitán Francisco de Villagra en 1605 y que estaban sobre el río Ulumpmampa o Lules en la desembocadura del mismo sobre el río Salí y no en el Nogalito como quieren afirmar falsamente. Es allí donde vivieron en el pasado los Lule. Las tierras Ulumpmampa actualmente corresponderían al ESTE ( 3 km)de Bella Vista, donde desemboca el río Lules después de recorrer más de 25 KM SOBRE LA LLANURA O PAMPA, e incluso haber sumado a su caudal el arroyo del Manantial y otros afluentes. Es decir, que, si la supuesta comunidad indígena Lule Ulumpmampa quiere reclamar tierras con ese nombre, debería hacerlo en otro lado y no en el Nogalito. Lamentablemente le erraron por más de 100 km a la zona denominada en el pasado como Ulumpmampa. Por si quieren ir a reclamar las tierras de Ulimpmampa les compartimos la información del archivo histórico de la provincia de Tucumán en la calle 25 de mayo.
- Pero lo más INVEROSIMIL fue poner a Mateo Cruz como cacique en el 1800 junto a su esposa María Cipriana Ramos. Mateo Cruz descendiente de españoles y su esposa María Cipriana Ramos vivían en San Miguel de Tucumán donde nacieron y fueron bautizados sus hijos según se encuentra en los libro de la Catedral de San Miguel de Tucumán.
Mateo Cruz y su esposa compran la estancia El Nogalito a Albeana Santillán el 30 de junio de 1849 es decir siglo XIX, ya con 9 (nueve) hijos nacidos, por la suma de $600 (seiscientos pesos) como ya explicáramos y demostramos con documentación. (Cfr. Archivo Histórico de la Provincia Folios 33 y 34 Serie B del Vol. 3 de Protocolos 1849 – 1859). Recién en 1849 es cuando toman posesión de esas tierras Mateo, Cipriana y sus hijos y no en 1800. Lo hace como un gran terrateniente y no como cacique, pues habían comprado 4500 hectáreas para la cría de ganado.
Don Mateo Cruz y Doña María Cipriano Ramos junto a sus hijos, se trasladan a su nueva residencia en San Miguel de Tucumán, al adquirir una propiedad en el año 1854, de media manzana con galpones y plantas frutales al lado de la Iglesia de la Piedad, contigua al cementerio de la Catedral, (hoy Iglesia de la Buen Pastor) entre las actuales calles Mendoza y Córdoba y Salta por el oeste, por el valor de $200 (doscientos pesos). Posteriormente Felipe Cruz el hijo Varón mayor de Mateo y Cipriana (quien fuera comisario de Raco) comprará a sus respectivos hermanos la casa y el terreno, cuando la heredan y años más tarde la venderá a los Médicci, según consta en el Archivo Histórico de la Provincia de Tucumán.
Es sabido que los verdaderos pueblos indígenas tienen sus propios cementerios. El Señor Manuel Joaquín Pérez y sus hermanos inventaron que el cementerio indígena está en Potrero de las Tablas y por ese motivo lo incluyen a Potrero de las Tablas en el relevamiento territorial indígena que hicieron los del INAI con apoyo de gendarmería en el año 2010, sin autorización de los propietarios. Entraron en todas las propiedades privadas sin ser autorizados.
Es totalmente FALSO que el cementerio de Potrero sea un cementerio indígena con sus antepasados. Si fuera verdad que Mateo y Cipriana fueron indígenas, como ellos dicen, tendrían que estar enterrados allí, pero no es así. Sin embargo para responder a la curiosidad del lector, les informamos y mostramos que Mateo Cruz murió con 110 años de vida y está enterrado en el cementerio de Lules. Murió un 30 de julio de 1889 y su partida de defunción se encuentra en famaillá folio N° 100.
En dicha acta de defunción figura que muere de Apoplejía y como ocupación figura PROPIETARIO, es decir que era un terrateniente como le gusta llamar a los falsos indígenas. Era dueño de la estancia del Nogalito con 4500 hectáreas y varias propiedades más.
Por su parte María Cipriana Ramos bautizada en la catedral de Tucumán el día 10 de febrero de 1807, murió en 1870 a los 63 años de vida, aunque dicen en la documentación tener unos 50 años y la enterraron en el cementerio de la catedral, es decir al lado de la casa donde ellos residían en la calle Mendoza casi calle Salta y no en el Nogalito. El matrimonio vivía en pleno centro de la ciudad de San Miguel de Tucumán. Años más tarde este cementerio fue trasladado, ya que la ciudad de San Miguel de Tucumán seguía creciendo
(copia del acta de defunción en la catedral de San Miguel de Tucumán).
- Poner a Mateo Cruz como descendiente de Camal, quien dicen era cacique en el 1760, es totalmente anacrónico. Camal como ya explicáramos anteriormente al hablar de la historia de los Lule, se une a la Reducción de los Lules en su cuarto traslado entre 1737 y 1742 y desde allí permanecerá en la Reducción en su regreso a Salta, donde seguirá viviendo hasta su muerte, según los escritos históricos. Si Mateo Cruz desciende de Camal como ellos afirman entonces, Mateo tendría que estar en Salta y allí tendrían que reclamar las tierras, como lo están haciendo en esa localidad una comunidad indígena Lule, descendientes de los lules de entonces. Contradictoriamente a lo que ellos afirman, Camal se unió a la reducción de los Lule que habían creado los Jesuitas en Salta, en Miraflores, justamente a pedido de su hijo antes de que este muriera, recibiendo todos los sacramentos. Es decir Camal se quedó sin hijos.
Es totalmente falsa la afirmación de que el padre de Mateo (nombre español) se llamaba Camal (nombre indígena), Lo que ignoran los falsos indígenas Lule del Nogalito es que el padre Mateo Cruz, se llamaba Felipe Cruz, como el nombre que puso a uno de sus hijos varones.
Felipe Cruz (padre) contradictoriamente a todo lo que ponen en el relato sobre la compañía de Jesús, era el hombre de confianza de los Jesuitas (así aparece en los archivos históricos referidos a la junta de temporalidades). Felipe Cruz era el capataz de la estancia más grande los Jesuitas en Tucumán y nos referimos a Tafí del Valle. Cuando los Jesuitas fueron expulsados en 1767, a pedido de la junta de las temporalidades, ayudó a los agrimensores a mojonear y delimitar las estancias y potreros de los jesuitas para su posterior remate. Este trabajo y la valoración que tenían sobre él, permitió, como figura en archivos históricos que se le concediera ganado para su crianza, como él ya acostumbraba hacer.
Si el lector está interesado, puede leer detenidamente la lista de las personas que trabajaban para los jesuitas y después de expulsión siguieron administrando las estancias bajo la autoridad de la junta de las temporalidades en Tucumán. En la siguiente lista puede apreciar el lector el nombre de FELIPE CRUZ capataz de la Hacienda de Tafí, y padre de Mateo Cruz.
- Es totalmente fantasioso por no decir mentiroso, el que se haya puesto en el relato que presenta la autodenominada comunidad en decir que se llama Nogalito la localidad porque en 1813 el ejército forestó Nogales. Como ya demostráramos anteriormente el nombre de Nogalito, surge de la división del Potrero del Durazno en tres y se debe a Joseph Andrés Romano, ya que en documento judicial del año 1791 aparece que fueron al “Potrero del Nogalito”. Veintidós años antes de la supuesta forestación ya aparece el nombre de Nogalito en documentaciones judiciales.
Sería un milagro que la forestación realizada por los militares como ellos afirman se haya extendido a toda la Yunga, porque es sabido que el Nogal silvestre es un árbol autóctono de la Yunga.
Así mismo, decir que se llama Potrero de las tablas porque se hizo un corral de palos o tablas es totalmente falaz, porque ya en documentos de 1787 aparece mencionado el paraje nombrado de LAS TABLAS. Las dos restantes fracciones del Potrero del Durazno, desde “…el río nombrado durazno…y por la del sur el Río que baja dela sierra del Poniente, que es donde encuentran todas las lomas del Paraje nombrado Las Tablas…” (Protocolo Serie A Vol IX, Foja 15 y 16), Juan José Quinteros vende a Don Joseph Patricio García, el 27 de febrero de 1787 y otro pedazo o parcela desde “el río que baja de la sierra del Poniente que es donde se encuentran todas las lomas del paraje nombrado Las Tablas … y al sur las lomas montañosas que caen a Famailla y de Oriente a Poniente los mismos linderos que en los escritos se me otorga…” (Protocolo Serie A Vol IX Foja 22 a 24), vende Juan José Quinteros al Sr. Alcalde Ordinario de primer voto Don Domingo de Villafañe, el día 4 de marzo de 1787.
Para evacuar la ignorancia de los falsos indígenas, les informamos que el nombre de Potrero de las tablas viene porque allí los Jesuitas tenían un aserradero, que para asombro nuestro y según consta en los libros históricos, poseían ya en 1743 sierras sin fin para el corte de madera por “cascada de agua”. Realmente un avance único e irrepetible de los Jesuitas para esa época.
- Resulta también FALSO decir que “…En el año 1905 los bisnietos de Mateo Cruz, trataron de regularizar la situación dominial de las tierras de Nogalito, en exigencias a la entonces legislación impuesta por el Estado”.
Por la muerte acaecida de sus padres, Don Felipe Cruz, inicia el juicio: “Felipe Cruz s/ deslinde judicial de la Estancia denominada Potrero de El Nogalito”, en el juzgado de 1º Instancia, a cargo del Dr. Padilla y la secretaría a cargo de E. Molina, de acuerdo a las posesiones que los hermanos tienen en ese momento.
El 6 de abril de 1905, por decreto del señor Juez de 1º Instancia, el Dr. Padilla, se nombra al Ingeniero Manuel Courel, para practicar la división de la Estancia denominada Potrero de El Nogalito, ubicada en el segundo distrito de Famaillá (hoy departamento de Lules), notificando a las siguientes partes 1º Don Felipe Cruz, 2º Los herederos de Doña Juana Cruz, casada con Don José González, cuyos herederos son Lino González, Gregorio González, Ignacia González de Chocobar y Juana González de Maturano, 3º al heredero de Doña María Josefa Cruz, su hijo Don Indalecio Cruz, 4ºDon Anselmo Cruz, 5º a los herederos de Doña María Lorenza Cruz de González, habido de su primer matrimonio: Don Francisco Solano Pérez, Doña Dionisia Pérez de Pereira, Doña María Ruperto Pérez, Don Prudencio Pérez, Doña Teresa Pérez, los herederos de Don Cipriano Pérez, Micaela, Guillermo y Martín Pérez, representados por su curador el Dr. Abraham de la Vega, la esposa de Don Rosario Ambrosio Pérez, Doña Rosa Pereira y Felipe Pérez
Al momento del deslinde Judicial, que no fue por exigencia de la legislación impuesta por el Estado como dicen en el relato, permanecían vivos DOS HIJOS: FELIPE CRUZ Y ANSELMO CRUZ. El resto de los convocados al deslinde son nietos y no bisnietos como afirman en el relato.
Son los hijos directos de Mateo y Cipriana y los nietos que dividen el Nogalito judicialmente en seis partes (incluyendo la de Trinidad Ramos por donación del año 1860).
Conclusión:
Pedimos perdón a nuestros lectores por lo extenso del escrito, pero es cierto que ante un extenso y fantasioso relato del origen de la falsa comunidad indígena Lule en Tucumán, solamente podíamos presentar la verdad fundamentándola.
Por el apoyo que han tenido a lo largo de los años estas personas, por integrantes del poder político y judicial, no eran ellos los que tenían que demostrar que lo que decían era verdadero, sino quienes decíamos que estaban mintiendo. Muchas veces fuimos desafiados por autoridades de distintos ámbitos a demostrar lo contrario de lo que ellos afirmaban en sus relatos.
María Elena Walsh estaría de acuerdo con nosotros al decir que vivimos en el Reino (país) que está al revés.
Me dijeron que en el Reino del Revés
Nada el pájaro y vuela el pez
Que los gatos no hacen miau y dicen yes
Porque estudian mucho inglés
Vamos a ver cómo es
El Reino del Revés
Vamos a ver cómo es
El Reino del Revés